Eto e' lo que hay, ta bien y to que new cell y to' la vaina del lao de Microsoft, pero... Vale la pena este lanzamiento? Veamos par de preguntitas comodas y sus repuestas pa' de una vez.
¿Qué hace Microsoft lanzando ahora, en 2010, su rival del iPhone?
¿No se da cuenta de que Apple tiene una ventaja de tres años, 70 millones de teléfonos y 300.000 aplicaciones? ¿Ni de que el teléfono Android de Google tiene una ventaja de dos años, alrededor de 30 millones de teléfonos y 100.000 aplicaciones?
¿Y Microsoft en serio cree que el mundo necesita otro diseño de teléfono de aplicaciones multitouch, negro y rectangular?
Es evidente que la respuesta a la última pregunta es sí. El Windows Phone 7 es un nuevo software que Microsoft espera que corra en nuevos teléfonos de diversos fabricantes y redes celulares. Lo probé en el casi idéntico Samsung Focus (AT&T), HTC Surround (AT&T) y HTC HD7 (T-Mobile). Todos salieron a la venta hoy en los Estados Unidos a 200 dólares (con contrato a dos años).
El nombre "Windows Phone 7" es doblemente confuso. En primer lugar, no es Windows. No tiene aspecto de Windows, no funciona como Windows, no tiene software de Windows, ni siquiera exige una PC con Windows. (Existe un programa del tipo de iTunes para cargar música y videos en el teléfono, pero está disponible para Mac y Windows.)
En segundo término, no es "7". El número implica cierta relación con Windows Mobile 6.5, el último intento de software de teléfono de Microsoft, que es empresarial, comprimido y complicado. No, Windows Phone 7 es sin duda un lanzamiento 1.0.
Eso puede sonar como un exabrupto. Pero "1.0" puede significar tanto "sin terminar" como "un nuevo comienzo lleno de innovaciones". Así, si bien Windows Phone 7 demuestra cierto auténtico genio, le falta una enorme lista de características que son habituales en el iPhone y el Android. ¿Están listos?
No hay copiar & pegar; tampoco carpetas para organizar las aplicaciones. No hay forma de incorporar nuevos ringtones ni manera de mandar videos a otros teléfonos como mensajes. Nada de video chat ni de cámaras frontales.
Y no hay multitasking. Uno puede escuchar su propia música mientras trabaja en otros programas, pero no puede escuchar, por ejemplo, la radio online Pandora.
¿Suena familiar? Esas eran, precisamente, las cosas que le faltaban también al iPhone 1.0. Por otra parte, hay un botón de búsqueda, pero no puede buscar en todo el teléfono al mismo tiempo (aplicaciones, e-mail y contactos simultáneamente, por ejemplo). No hay correo de voz visual. Tampoco hay conexión a Internet (por la que se pagan 20 dólares adicionales por mes para poder usar el teléfono como una antena de Internet para la laptop).
Como el iPhone, el navegador no reproduce videos Flash en la web, pero tampoco reproduce los videos HTML5 que reproduce el iPhone, ni siquiera videos en el propio formato Silverlight de Microsoft; de modo que no hay YouTube, Hulu ni videos de noticias online.
El programa de e-mail no puede unificar las cuentas de e-mail en una única bandeja de entrada. De hecho, cada cuenta de e-mail figura como un ícono separado en la pantalla. No hay continuidad (threading) de mensajes.
El calendario puede sincronizarse con calendarios online como el de Yahoo o el de Google. Sin embargo, y eso es increíble, sólo puede mostrar una categoría por vez, como casa o trabajo. Si uno incorporó un código de color en la agenda de compromisos, entonces el elemento es por completo inútil.
La libreta de direcciones tiene el problema opuesto: muestra la totalidad de los agendados en todas las cuentas, Facebook entre ellas, en una sola lista larga. Si uno tiene centenares de amigos en Facebook, éstos se mezclan en la lista de personas a las que se llama con frecuencia. (No hay integración de Twitter, sino sólo una aplicación aparte.) Por lo que parece, Microsoft tiene una extensa lista de cosas pendientes, y así es. Sin embargo, Dios sabe que si hay una empresa famosa por su abordaje lento, obstinado y multimillonario de las mejoras de software, es Microsoft. La compañía jura que va a hacer del Windows Phone 7 un gran competidor. Lo menos que puede pensarse es que no va a matar el proyecto por completo después de sólo dos meses, como hizo este verano (boreal) con sus teléfonos celulares Microsoft Kin.
La realidad es esta: el WP7 es un lanzamiento 1.0 también en el buen sentido. Es una completa reformulación del diseño de software de teléfono de aplicaciones. De alguna manera, Microsoft salió airosa de la tarea en extremo difícil de crear un diseño de software nuevo, placentero y atractivo que no se parece en nada al iPhone ni al Android.
La pantalla de inicio del WP7 no tiene íconos de aplicaciones con espaciamiento parejo en múltiples pantallas de inicio paralelas, como el Android o el iPhone. En lugar de ello, se ven dos columnas en movimiento de rectángulos de múltiples colores. Cada uno representa una aplicación, una persona de acceso rápido (speed dial), una página web favorita, una lista de música o lo que uno quiera poner ahí. Son fáciles de cambiar, organizar y eliminar. (Gracias a Dios. Microsoft permite que las empresas de telefonía celular, como AT&T o T-Mobile, instalen su propio software basura. Por lo menos se lo puede eliminar desde el primer día.)
Esos rectángulos grandes y fáciles de digitar son también informativos. Una serie de rectángulos nos dice cuántos mensajes de voz, e-mails o actualizaciones de aplicaciones hay pendientes. El rectángulo de música muestra la parte de arte de los discos, mientras que el de calendario indica nuestro próximo compromiso.
También hay abundancia de otras ideas nuevas e inteligentes. En cualquier teléfono WP7 hay un botón de cámara, y se pueden sacar fotos hasta cuando el teléfono está apagado, lo cual es fantástico. Se puede programar el teléfono para que suba de forma automática nuestras fotos a Facebook o al SkyDrive de Microsoft a medida que las sacamos.
Se puede llamar por voz, así como también buscar en Bing.com o abrir aplicaciones. Por desgracia, no se puede escribir por voz, como se puede hacer en el iPhone (con la aplicación gratuita Dragon Dictation) o en el Android (incorporada).
Hay varias aplicaciones que son "centros", programas más ambiciosos, de múltiples pantallas, como Pictures, People u Office. ¿Cómo se sabe que se puede tocar para ver el panel siguiente? Porque se ve el borde de la "página" siguiente que sobresale del borde de la pantalla. Inteligente.
Hasta la pantalla de bloqueo parece haber recibido la visita del Hada de las Buenas Ideas. Sin ni siquiera tener que activar del todo el teléfono, se puede ver la fecha, la hora, el siguiente compromiso y hasta cuántos nuevos mensajes hay en espera (e-mails, mensajes de voz, mensajes de texto).
El teléfono WP7, entonces, es tan veloz y placentero como sus rivales. Pero hay que pensar en el sistema de despertadores, los cargadores, las aplicaciones, los accesorios y hasta en los autos que son compatibles con el iPhone. ¿Qué puede ofrecer Microsoft que convenza a alguien de ser un entusiasta del WP7?
Tres cosas. La primera es el Office. El teléfono WP7 tiene Word, Excel y PowerPoint. De todos modos, si se tiene en cuenta que se supone que el Office es el plato fuerte de Microsoft, está extrañamente despojado. Ni siquiera se puede cambiar la letra en el Word, y todo lo que se puede hacer en PowerPoint es editar casillas de texto. No se puede crear un nuevo archivo. Las aplicaciones de Office disponibles para el iPhone y el Android son más completas.
La segunda es Zune. Si no se es una de las seis personas que lo compraron, el Zune es el rival de Microsoft del iPod. Fue un fracaso, pero su software es excelente, tiene un almacenamiento online rico y social, y el plan de 15 dólares por mes, que cubre todo lo que se quiera escuchar, convierte el teléfono WP7 en una radio de bolsillo a pedido.
Por último, Xbox. Si se tiene una consola de juego Xbox, nuestras estadísticas y avatares (un ícono en la pantalla) aparecen en el teléfono y ya se puede acceder a una amplia variedad de juegos interactivos.
Microsoft impone un mínimo de especificaciones técnicas a las compañías que fabrican los teléfonos WP7 a los efectos de que éstos sean muy veloces. El software responde al tacto de forma fluida y sin esfuerzo, con elementos animados que nunca interfieren con el usuario.
La vida útil de la batería es otra historia. Como en el caso de teléfonos similares, hay que cargar estos primeros teléfonos WP7 todas las noches. Hay que estar atentos, ya que por la noche se consumen a tal velocidad que podría pensarse que tienen un agujero.
Es asombroso que Microsoft haya concretado la parte más difícil: creó una forma del todo nueva de manejar las alrededor de diecisiete funciones de un teléfono de aplicaciones que es divertida de usar, clara y atractiva
Es evidente que Microsoft aún tiene mucho trabajo por delante, y va a pasar mucho tiempo antes de que ofrezca una selección decente de aplicaciones. La empresa piensa distribuir actualizaciones de software gratuitas a medida que vaya resolviendo falencias. En otras palabras, por ahora este puede no ser el teléfono que uno querría comprar.
Pero sin duda es un teléfono que uno querrá ver. :Fuente
¿Qué hace Microsoft lanzando ahora, en 2010, su rival del iPhone?
¿No se da cuenta de que Apple tiene una ventaja de tres años, 70 millones de teléfonos y 300.000 aplicaciones? ¿Ni de que el teléfono Android de Google tiene una ventaja de dos años, alrededor de 30 millones de teléfonos y 100.000 aplicaciones?
¿Y Microsoft en serio cree que el mundo necesita otro diseño de teléfono de aplicaciones multitouch, negro y rectangular?
Es evidente que la respuesta a la última pregunta es sí. El Windows Phone 7 es un nuevo software que Microsoft espera que corra en nuevos teléfonos de diversos fabricantes y redes celulares. Lo probé en el casi idéntico Samsung Focus (AT&T), HTC Surround (AT&T) y HTC HD7 (T-Mobile). Todos salieron a la venta hoy en los Estados Unidos a 200 dólares (con contrato a dos años).
El nombre "Windows Phone 7" es doblemente confuso. En primer lugar, no es Windows. No tiene aspecto de Windows, no funciona como Windows, no tiene software de Windows, ni siquiera exige una PC con Windows. (Existe un programa del tipo de iTunes para cargar música y videos en el teléfono, pero está disponible para Mac y Windows.)
En segundo término, no es "7". El número implica cierta relación con Windows Mobile 6.5, el último intento de software de teléfono de Microsoft, que es empresarial, comprimido y complicado. No, Windows Phone 7 es sin duda un lanzamiento 1.0.
Eso puede sonar como un exabrupto. Pero "1.0" puede significar tanto "sin terminar" como "un nuevo comienzo lleno de innovaciones". Así, si bien Windows Phone 7 demuestra cierto auténtico genio, le falta una enorme lista de características que son habituales en el iPhone y el Android. ¿Están listos?
No hay copiar & pegar; tampoco carpetas para organizar las aplicaciones. No hay forma de incorporar nuevos ringtones ni manera de mandar videos a otros teléfonos como mensajes. Nada de video chat ni de cámaras frontales.
Y no hay multitasking. Uno puede escuchar su propia música mientras trabaja en otros programas, pero no puede escuchar, por ejemplo, la radio online Pandora.
¿Suena familiar? Esas eran, precisamente, las cosas que le faltaban también al iPhone 1.0. Por otra parte, hay un botón de búsqueda, pero no puede buscar en todo el teléfono al mismo tiempo (aplicaciones, e-mail y contactos simultáneamente, por ejemplo). No hay correo de voz visual. Tampoco hay conexión a Internet (por la que se pagan 20 dólares adicionales por mes para poder usar el teléfono como una antena de Internet para la laptop).
Como el iPhone, el navegador no reproduce videos Flash en la web, pero tampoco reproduce los videos HTML5 que reproduce el iPhone, ni siquiera videos en el propio formato Silverlight de Microsoft; de modo que no hay YouTube, Hulu ni videos de noticias online.
El programa de e-mail no puede unificar las cuentas de e-mail en una única bandeja de entrada. De hecho, cada cuenta de e-mail figura como un ícono separado en la pantalla. No hay continuidad (threading) de mensajes.
El calendario puede sincronizarse con calendarios online como el de Yahoo o el de Google. Sin embargo, y eso es increíble, sólo puede mostrar una categoría por vez, como casa o trabajo. Si uno incorporó un código de color en la agenda de compromisos, entonces el elemento es por completo inútil.
La libreta de direcciones tiene el problema opuesto: muestra la totalidad de los agendados en todas las cuentas, Facebook entre ellas, en una sola lista larga. Si uno tiene centenares de amigos en Facebook, éstos se mezclan en la lista de personas a las que se llama con frecuencia. (No hay integración de Twitter, sino sólo una aplicación aparte.) Por lo que parece, Microsoft tiene una extensa lista de cosas pendientes, y así es. Sin embargo, Dios sabe que si hay una empresa famosa por su abordaje lento, obstinado y multimillonario de las mejoras de software, es Microsoft. La compañía jura que va a hacer del Windows Phone 7 un gran competidor. Lo menos que puede pensarse es que no va a matar el proyecto por completo después de sólo dos meses, como hizo este verano (boreal) con sus teléfonos celulares Microsoft Kin.
La realidad es esta: el WP7 es un lanzamiento 1.0 también en el buen sentido. Es una completa reformulación del diseño de software de teléfono de aplicaciones. De alguna manera, Microsoft salió airosa de la tarea en extremo difícil de crear un diseño de software nuevo, placentero y atractivo que no se parece en nada al iPhone ni al Android.
La pantalla de inicio del WP7 no tiene íconos de aplicaciones con espaciamiento parejo en múltiples pantallas de inicio paralelas, como el Android o el iPhone. En lugar de ello, se ven dos columnas en movimiento de rectángulos de múltiples colores. Cada uno representa una aplicación, una persona de acceso rápido (speed dial), una página web favorita, una lista de música o lo que uno quiera poner ahí. Son fáciles de cambiar, organizar y eliminar. (Gracias a Dios. Microsoft permite que las empresas de telefonía celular, como AT&T o T-Mobile, instalen su propio software basura. Por lo menos se lo puede eliminar desde el primer día.)
Esos rectángulos grandes y fáciles de digitar son también informativos. Una serie de rectángulos nos dice cuántos mensajes de voz, e-mails o actualizaciones de aplicaciones hay pendientes. El rectángulo de música muestra la parte de arte de los discos, mientras que el de calendario indica nuestro próximo compromiso.
También hay abundancia de otras ideas nuevas e inteligentes. En cualquier teléfono WP7 hay un botón de cámara, y se pueden sacar fotos hasta cuando el teléfono está apagado, lo cual es fantástico. Se puede programar el teléfono para que suba de forma automática nuestras fotos a Facebook o al SkyDrive de Microsoft a medida que las sacamos.
Se puede llamar por voz, así como también buscar en Bing.com o abrir aplicaciones. Por desgracia, no se puede escribir por voz, como se puede hacer en el iPhone (con la aplicación gratuita Dragon Dictation) o en el Android (incorporada).
Hay varias aplicaciones que son "centros", programas más ambiciosos, de múltiples pantallas, como Pictures, People u Office. ¿Cómo se sabe que se puede tocar para ver el panel siguiente? Porque se ve el borde de la "página" siguiente que sobresale del borde de la pantalla. Inteligente.
Hasta la pantalla de bloqueo parece haber recibido la visita del Hada de las Buenas Ideas. Sin ni siquiera tener que activar del todo el teléfono, se puede ver la fecha, la hora, el siguiente compromiso y hasta cuántos nuevos mensajes hay en espera (e-mails, mensajes de voz, mensajes de texto).
El teléfono WP7, entonces, es tan veloz y placentero como sus rivales. Pero hay que pensar en el sistema de despertadores, los cargadores, las aplicaciones, los accesorios y hasta en los autos que son compatibles con el iPhone. ¿Qué puede ofrecer Microsoft que convenza a alguien de ser un entusiasta del WP7?
Tres cosas. La primera es el Office. El teléfono WP7 tiene Word, Excel y PowerPoint. De todos modos, si se tiene en cuenta que se supone que el Office es el plato fuerte de Microsoft, está extrañamente despojado. Ni siquiera se puede cambiar la letra en el Word, y todo lo que se puede hacer en PowerPoint es editar casillas de texto. No se puede crear un nuevo archivo. Las aplicaciones de Office disponibles para el iPhone y el Android son más completas.
La segunda es Zune. Si no se es una de las seis personas que lo compraron, el Zune es el rival de Microsoft del iPod. Fue un fracaso, pero su software es excelente, tiene un almacenamiento online rico y social, y el plan de 15 dólares por mes, que cubre todo lo que se quiera escuchar, convierte el teléfono WP7 en una radio de bolsillo a pedido.
Por último, Xbox. Si se tiene una consola de juego Xbox, nuestras estadísticas y avatares (un ícono en la pantalla) aparecen en el teléfono y ya se puede acceder a una amplia variedad de juegos interactivos.
Microsoft impone un mínimo de especificaciones técnicas a las compañías que fabrican los teléfonos WP7 a los efectos de que éstos sean muy veloces. El software responde al tacto de forma fluida y sin esfuerzo, con elementos animados que nunca interfieren con el usuario.
La vida útil de la batería es otra historia. Como en el caso de teléfonos similares, hay que cargar estos primeros teléfonos WP7 todas las noches. Hay que estar atentos, ya que por la noche se consumen a tal velocidad que podría pensarse que tienen un agujero.
Es asombroso que Microsoft haya concretado la parte más difícil: creó una forma del todo nueva de manejar las alrededor de diecisiete funciones de un teléfono de aplicaciones que es divertida de usar, clara y atractiva
Es evidente que Microsoft aún tiene mucho trabajo por delante, y va a pasar mucho tiempo antes de que ofrezca una selección decente de aplicaciones. La empresa piensa distribuir actualizaciones de software gratuitas a medida que vaya resolviendo falencias. En otras palabras, por ahora este puede no ser el teléfono que uno querría comprar.
Pero sin duda es un teléfono que uno querrá ver. :Fuente
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